El Gobierno ha aprobado un
anteproyecto de ley destinado a reformar los sistemas eléctricos de los dos
archipiélagos, Ceuta y Melilla. El objetivo es garantizar el abastecimiento de electricidad
en estas zonas y reducir los costes que suponen sus suministros eléctricos.
Entre las medidas destacan la
instalación de nuevos generadores de electricidad más eficientes y el impulso a
la entrada de nuevos operadores de sistemas eléctricos insulares y
extrapeninsulares. Además, se va a cambiar la forma de calcular lo que cuesta
el combustible que se usa para generar energía.
El Gobierno pretende, con estos
cambios, lograr que los sistemas eléctricos sean más eficientes, tanto
ambiental como económicamente. Para ello, se plantea que las nuevas
instalaciones que se construyan en zonas donde se supere el índice de cobertura
puedan percibir el régimen retributivo por razones de seguridad de suministro o
eficiencia.
Para favorecer la entrada de operadores
no se podrán otorgar estas retribuciones a las empresas que concentran más del
40% de la capacidad de generación en cada sistema.